Noto que parte del tiempo estoy ocupada con la aceptación de mi sombra.
Nuestra sombra no es nuestro lado malo, pero es la parte que está retorcida en el curso del tiempo, por efecto de nuestra historia, por nuestra sociedad, por nuestra cultura.
Ella se muestra de manera indirecta, y pide ser amada de una manera incondicional, así es que podemos vivir nuestros seres únicos de un modo cada vez más pleno, más completo.
Ahora que tengo más tiempo para mí, siento el deseo de trabajar con personas, de una manera nueva.
Pregunto a lo Invisible cual es el Sueño más Alto que desea manifestarse y espero la respuesta en silencio.
Estoy sorprendida por las palabras que surgen en mí y me siento tocada por la simplicidad de la respuesta:
Tu Sueño más Alto debe ser decidido por ti.
Damos la energía y la fuerza para manifestarla.
Siempre estoy sorprendida cuando me doy cuenta que soy yo quien debe decidir.
Cuando me pregunto qué es lo que deseo, sé cual es la respuesta: Quiero trabajar un día por semana y dar consultas a personas que quieren encontrar una perspectiva nueva para un aspecto de su vida en lo cual se sienten bloqueados.
Siento alegría acerca de la decisión y tengo más claridad acerca de la dirección de mi vida.