Hacer esta última pintura fue un proceso bastante caótico.
Experimenté muchas contradicciones en mí misma y eso causó que me sintiera bastante insegura.
El tema principal de la pintura fue lo finito y lo infinito, y la conexión entre estas polaridades.
Después de pintar el sello en el lado izquierdo del cuadro pude descansar.
Me doy cuenta ahora de la importancia de volver a la sencillez de solamente ser, y de confiar en un poder superior que nos lleva.
El nombre de la pintura es La que guarda el espacio.